VALIó LA PENA ESPERAR
En septiembre de 2024, una familia de Buenavista, aunque no formaba parte de la iglesia, pidió ayuda al pastor Omar y Zenia para conseguir una silla de ruedas para su hija de 7 años que tiene parálisis cerebral. A Miyani se le había quedado pequeña la carriola y sus padres tenían que llevarla a la escuela.
Aliento Cuba intervino rápidamente y consiguió una silla de ruedas, un donante y espacio en un contenedor que se dejaría en una semana. Después de meses de esfuerzo por parte de una docena de personas, la silla de ruedas finalmente llegó en enero.
La sonrisa en el rostro de Miyani y la gratitud en los ojos de sus padres llenan nuestros corazones de alegría.
“Ayudar a una persona necesitada es bueno en sí mismo. Pero el grado de bondad se ve enormemente afectado por la actitud con la que se hace. … Si ayudas a la persona con un espíritu de alegría, entonces la ayuda será recibida con alegría. Y la alegría es la actitud apropiada para ayudar a los demás porque los actos de generosidad son una fuente de bendición tanto para el que da como para el que recibe”.
San Juan Crisóstomo (347-407)